Comunidades afectadas por Hidroituango esperamos que esta vez sí nos cumpla señor Gobernador de Antioquia

El pasado viernes 25 de mayo durante la visita a Valdivia del señor Gobernador Luis Pérez Gutiérrez este se comprometió públicamente con las comunidades afectadas por #Hidroituango articuladas en el Movimiento Ríos Vivos Antioquia con los siguientes puntos:

1. Qué se conozca  próximamente la verdad sobre las razones por las cuales Empresas Públicas de Medellín EPM realizó como una medida de hecho el llenado del embalse taponando dos de los tres túneles utilizados para desviar el río Cauca.

2. Qué todas las comunidades afectadas por Hidroituango serán reparadas integralmente, tanto aguas arriba cómo aguas abajo.

3. Qué se reactivará con urgencia la Mesa de Dialogo, Análisis y Solución de las problemáticas Minero Energéticas del departamento que como prioridad tiene a Hidroituango para avanzar en soluciones reales a partir del diálogo liderado por la gobernación con el Movimiento Ríos Vivos Antioquia, mediante una reunión para esta semana según la sugerencia del gobernador lunes o martes, con todos los líderes de Ríos Vivos Antioquia.

4. Qué se implementará para nuestra protección como Movimiento un albergue exclusivo para los integrantes del Movimiento en el municipio de Valdivia mientras desaparece el riesgo para las familias y para aquellas que perdieron sus viviendas, mientras le son nuevamente construidas en lugares seguros.

5. Qué en ejercicio de nuestro derecho a participar de las decisiones que nos afectan tendremos espacio como Movimiento en el Puesto de Mando Unificado PMU de todo el Proyecto Hidroituango y del municipio de Valdivia, para lo cual nos solicitó delegar a dos o tres líderes que a su vez informarían a los demás integrantes del Movimiento y servirían de enlace

Sobre el último compromiso el mismo día viernes nos acercamos en las horas de la tarde al PMU de Valdivia y nos respondieron que lo que dijo el gobernador no era cierto y no se nos permitirá participar en el espacio. Solicitamos que nos aclare señor gobernador si su palabra se respeta o no en estos espacios, si tiene capacidad para decidir y defender los derechos de los ciudadanos en el PMU o por el contrario es EPM y otros los organismos que tomas las decisiones.

En el año 2016 a raíz de fuertes protestas del Movimiento en la ciudad  de Medellín el Gobernador, por nuestra solicitud, creó un decreto departamental para abordar la crisis generada por Hidroituango no obstante hasta el momento en el espacio de esta Mesa no se ha avanzado, ha habido dilación e irrespeto y ante el arbitrario llenado anticipado del embalse que generó el desplazamiento de cientos de familias afectadas se hace necesario que hoy más que nunca, después de un mes de iniciar esta tragedia, la Gobernación de Antioquia le cumpla a las comunidades afectadas articuladas en el Movimiento Ríos Vivos Antioquia.
¡Río arriba, río abajo, nos dejaron sin trabajo!


Una muerte más por Hidroituango

Viernes 25 de mayo. 

Una muerte más por Hidroituango
#LiberenElRíoCauca #HidroituangoUnDesastre #VíctimasDeHidroituango


Muere Alba Liliana Echavarría Gómez cuando su familia la llevaba al hospital de Briceño para recibir atención médica de urgencia. Alba Liliana vivían en la vereda El Torrente del municipio de Ituango.

Sufría de asma, su esposo y demás familiares la llevaban hoy 25 de mayo al hospital, no pudieron atravesar el río Cauca, pues el puente Palestina que comunicaba a las veredas El Torrente, La Rica, Filadelfia El Aro, San Luis el Aro, fue destruido por la catástrofe generada por Hidroituango.

Alba Liliana deja una bebita de 15 meses llamada Mariana.
Desde las 9 de la mañana sus familiares están esperando que el cuerpo de su ser querido sea recogido. Hasta el momento sigue donde estaba el puente Palestina.

Exigimos que las autoridades competentes vayan por su cuerpo, pues lo que informan es que no tiene funeraria y no la pueden trasladar.
Exigimos que Hidroituango responda por ésta y todas las víctimas que ha generado.
La familia sin encontrar el apoyo de la institucionalidad y ver que Alba Liliana no era recogida, decidieron hacer un paro a EPM-Hidroituango con el objetivo de que la recogieran, pues esta empresa continúa con labores en dicho lugar. 

Los carros han pasado varias veces por el lado de Alba Liliana y no se ofrecían a brindar ayuda. Pero en el momento en que se realizó la manifestación de sus seres queridos la empresa se comprometió en enviarles un carro.
Hasta el momento no llega. 







Por el derecho a la verdad sobre Hidroituango!!


Las comunidades afectadas exigimos información clara, veraz, suficiente y oportuna

#LiberenElRíoCauca
#HidroituangoUnDesastre

El gran problema ambiental y social ocasionado por #Hidroituango que ha afectado severamente la tranquilidad, los proyectos de vida, los medios de subsistencia y las viviendas de las comunidades ribereñas  de 17 localidades en cuatro departamentos, llegando incluso a amenazar la vida de más de 120 mil personas, está siendo manejado por los mismos que lo causaron. Han difundido de manera engañosa que el problema se soluciona acelerando el muro de Hidroituango. Nada más alejado de la realidad.

Las informaciones que se brindan son precarias, contradictorias o a cuenta gotas. Da cuenta de ello la última alerta confirmada hace unos minutos y de la que desde anoche se solicitó infructuosamente información a EPM y a los organismos de atención de emergencias que no dieron ninguna respuesta.
 


Toda información y decisión gira alrededor de EPM, la empresa que ocasionó el daño lo cual  genera desconfianza en la zona  manteniendo a las comunidades en zozobra y a la opinión pública en vilo. De esto  se desprende el ocultamiento de la verdadera situación e intenciones que se dirigen más a la priorización del proyecto que a la protección de las poblaciones perjudicadas.

Los responsables de esta tragedia dicen estar trabajando por su solución pero no dan participación a las comunidades afectadas ni a sus organismos representativos como el Movimiento Ríos Vivos Antioquia.  Parte de este manejo excluyente es el sesgo informativo en el que se oculta y manipula  la realidad de lo que viene sucediendo así como la verdadera dimensión e inminencia del riesgo.

La transparencia que se reclama comprende todo lo relacionado con los aspectos técnicos, administrativos y de corrupción que han rodeado la realización de este megaproyecto cuya suspensión demandamos en aras del principio de precaución y el derecho a la vida de las comunidades humanas y del ambiente en su conjunto que están en riesgo. 

Reclamamos de la empresa EPM y de los gobiernos Nacional, departamental y locales información clara, veraz y suficiente sobre lo que está sucediendo; es el derecho de las comunidades y del país.

Así mismo demandamos a los organismos de control que descorran este velo y garanticen que el derecho a la información sea una realidad.

Exigimos que el Puesto de Mando Unificado también sea integrado con voceros y representantes de las comunidades afectadas para garantizar la participación y la máxima información.

Movimiento Ríos Vivos Antioquia y CAJAR
Cañón del Río Cauca,
20 de mayo de 2018.  11:30 p.m

¿Quiénes son los Cañoneros desplazados por Hidroituango?

Neyla Castillo E. Medellín, 18 de mayo de 2018
 
En el año 1837 el resguardo indígena de San Pedro de Sabanalarga del Cañón del Cauca -creado a comienzos del siglo XVII- fue disuelto y las tierras repartidas a sus habitantes, los indígenas Nutabes. A cada persona, sin distinción de género ni de edad, le fue adjudicado un número variable de cuadras de tierra de manera individual o en común con otros propietarios. Suceba, Torres, Toro, Sucerquia, Valle, Chancí, López, Yotagrí, Oquendo, Moreno, Barbarán, Mejía, Tumblé, Suceba, Nohavá, Hoguín, David, Renegado, Parias, Reyes, Taparcúa, Santamaría, Georje, Taborda, Tumblé, Mejía, Peñas, Ortíz, Guzmán, Concha, Pozo, Martínez, Graciano, Pená, Silva, Durango, Uta, Úsuga, Villa, Espinosa, Jaramillo, García, Toldas, Chica y Congote constituyen los apellidos de alrededor de 950 indígenas que recibieron los títulos de las tierras del cañón correspondiente a los actuales municipios de Sabanalarga-Toledo y Buriticá-Ituango, situadas a ambos lados del río Cauca en las vertientes de las cordilleras Central y Occidental. 

 

En su condición de propietarios en su territorio ancestral, pocas veces en el pasado hicieron procesos de sucesión cuando el dueño original fallecía; de esta manera, el acceso a la tierra se hacía efectivo por la vía del reconocimiento colectivo del derecho de sucesión de los herederos. Cuando vendían la tierra, la mayoría de las veces no entregaban escritura o título de propiedad, sino la parte de los derechos que les correspondía en las tierras heredadas, muchas de las cuales eran tierras en común con otros propietarios. Aún existen los “comunes”, tierras colectivas a las que pueden acceder los miembros de las familias herederas para cultivar maíz, para pastar los animales, recoger leña.
 

Siguiendo esta lógica, los cañoneros, de los que hacen parte las familias reconocidas en abril del 2017 por el Ministerio del Interior como integrantes del Cabildo Indígena Nutabe de Orobajo, han habitado sus tierras ancestrales a orillas del río Cauca. Viven allí porque son de allí donde también nacieron sus abuelos y sus antepasados, en una línea de sucesión que se prolonga en la profundidad de los tiempos precolombinos. 
 

Esos cañoneros, para EPM, para la gobernación y para los grandes intereses detrás de Hidroituango, son los enemigos del proyecto que no quieren el desarrollo. Despreciables y despreciados porque luchan por el reconocimiento de sus derechos. La mejor manera de borrarlos, de eliminarlos, es desconociéndolos, convirtiéndolos en unas pocas familias a las cuales ya se “les compensó por sus tierras y sus casas” pagándoles a 170 pesos el metro cuadrado de tierra. Los demás, los que perdieron el río del que vivían y sus ranchos situados en las playas –que según la legislación colombiana son públicas-, son los desplazados de Sabanalarga, de Peque, Ituango y Toledo organizados en el Movimiento Ríos Vivos que hoy reclaman ayuda y atención. Los mismos que el gerente de EPM señala ante los medios de comunicación como personas que estaban ilegalmente en las playas ya que las Empresas habían comprado todas las tierras. 
 

Los cañoneros del Cauca son una cultura no reconocida en Antioquia y en Colombia. Así como la comunidad de Orobajo de Sabanalarga, todos son Nutabes aunque no hayan conformado cabildos indígenas; conforman un entramado de comunidades de parientes que habitan todo el cañón y que con pocos esfuerzos aún se pueden identificar por sus apellidos coloniales. Todos participan de los mismos códigos culturales y de una historia similar para significar y valorar el medio que habitan, el río, las montañas, las playas, las quebradas. En el Cañón nada escapa a su conocimiento. Su cultura ancestral está estructurada en torno al barequeo. Viven –vivían- fundamentalmente del Cauca del que extraían oro con una batea y un cajón, y del pescado que les aseguraba la carne de su alimentación. En los bosques ribereños obtenían frutas, leña, plantas medicinales y alimenticias, y ocasionalmente animales de monte. Con el oro que obtenían compraban todos los alimentos que no producían. Un cañonero nunca pasaba hambre; siempre tenían la playa para hacer su casa y vivir el tiempo que quisiera sin tener que pedirle permiso a nadie, al lado del río, el “patrón mono” que les daba todo lo que necesitaban a cambio de su buen uso. Así vivían hasta que llegó el proyecto Hidroituango, sus dueños, sus agentes, y lograron lo que no hicieron los españoles al conquistar su territorio: quitarles el río. 
 

El despojo abrupto por la inundación inesperada, los ha dejado con la mirada perdida ante la incertidumbre de su futuro; nadie les dice qué va a ser de ellas. Algun@s lloran en las noches. Don Remigio Moreno, ese anciano venerable y sabio de Sabanalarga que como pocos sabía “los misterios de las aguas”, de “los viveros” donde se reproducían los animales del bosque y de los ríos, los “secretos de las plantas”, el que conocía los espíritus que cuidaban el río, el oro, los animales y las plantas, decidió dejar volar su mente por parajes y experiencias de otros tiempos, mucho más gratas que vivir la destrucción del río por Hidroituango. Sin embargo, los cañoneros de esa región donde se gestó la Antioquia colonial, siguen siendo los enemigos que no tienen derechos, oportunistas pescando en río revuelto.


¡AGUAS PARA LA VIDA, NO PARA LA MUERTE!